ARTÍCULO DE OPINIÓN: CENTRALISMO EN LA SELECCIÓN NACIONAL DE JUAN REYNOSO
Después de conocer los convocados de la Selección del Perú para los partidos frente a Chile y Argentina respectivamente, se vio que el único convocado del cuadro ‘dominó’ y de todo el interior del Perú es Carlos Caceda.
Esto deja dudas de porque, jugadores como Kenji Cabrera, Jamir D’Arrido no se encuentran en la lista, ya que son futbolistas que a día de hoy gozan un mejor presente. Esto no es el único caso futbolístico en este momento, ya que, tiempo atrás jugadores como Marcos Llulla, Alexis Áreas, Willian Chiroque fueron marginados de varias convocatorias en diversos procesos.
Ante estas circunstancias se puede deducir que los futbolistas que militan jugando en equipos de provincia, no tienen oportunidad en la selección nacional, salvo que salgan al exterior o jueguen en un equipo de la Capital.. Tras el paso de los años, Sergio Markarian, Ricardo Gareca y ahora Juan Maximo Reynoso siguen con esta idea que en la actualidad ya podemos llamar un seleccionado con presencia capitalista en cuanto a sus jugadores.
Sin ir muy lejos en el presente podemos ver que jugadores como, Jamir D’Arrigo y Kenji Cabrera no son tomados en cuenta a pesar de estar demostrando un alto nivel futbolístico. A esto se le puede sumar Luis Iberico, jugador que careció de convocatorias en su momento. El hincha de los equipos de provincia cree que ya es hora de dejar el centralismo y ver el rendimiento de jugadores que destacan en las provincias del Perú. Además, que se pueden adaptar a los escenarios climáticos que ofrecen diversas localías en las Eliminatorias.
Se debe dejar de lado, presencias que no aportan, como Nilson Loyola, Raul Ruidiaz, Aldo Corso, Sergio Peña entre otros jugadores que son irregulares en cuanto rendimiento y continuidad.
Si se esta dando la oportunidad a nuevos jugadores que no se margine a las demas regiones de nuestro Perú. El jugador peruano destaca y puede hacerlo en cualquier lugar no solo en la capital, esto gracias a su buena técnica, ganas de jugar y hambre de sobresalir a base de oportunidades.
POR: LIZADO LOVÓN
