OTRA OPORTUNIDAD DESPERDICIADA
En medio de la reciente noticia sobre el descubrimiento de reservas de litio en salares de Arequipa, Moquegua y Tacna, surge la interrogante crucial: ¿Está el Perú preparado para gestionar eficazmente estos recursos y capitalizar esta oportunidad de desarrollo? Lamentablemente, la respuesta parece ser un “no” contundente.
Por: Jonathan Muñoz
Mientras países vecinos como México, Bolivia, Chile y Argentina implementan estrategias para la explotación sostenible del litio en beneficio de sus estados, el Perú carece de una visión estratégica clara al respecto. Esta omisión es sorprendente, considerando que Puno concentra casi la totalidad de este mineral. Según Ulises Raúl Solís Llapa, gerente general de American Lithium Corp. en Perú, afirma que si bien el Perú aún no aparece en la lista de los principales productores de este metal, tiene suficientes reservas para superar a los actuales principales productores que conforman el triángulo del litio (Bolivia, Chile y Argentina).
La importancia del litio en la economía mundial no puede subestimarse. Su valor en el mercado ha experimentado un crecimiento exponencial, y su versatilidad lo hace esencial para la fabricación de diversos dispositivos, desde baterías de vehículos eléctricos hasta tratamientos médicos. Es crucial destacar que países vecinos han tomado medidas para asegurar la explotación sostenible y la maximización de beneficios para sus ciudadanos.
Por ejemplo, el presidente Andrés Manuel López Obrador de México publicó en 2022 una reforma a la Ley Minera para nacionalizar este recurso por medio de un organismo público descentralizado encargado de su obtención, asegurando que no se otorgarán concesiones para su explotación. En Chile, el presidente Gabriel Boric está enfocado en la elaboración de una Estrategia Nacional del Litio que, en conjunto con actores del mundo público y privado, pretende hacer del país un referente global en el sector. Bolivia, desde 2008, ha mantenido la explotación del metal en manos del Estado.
Contrastando estas acciones positivas, el Perú parece rezagado y desaprovechando la oportunidad de convertir el litio en una palanca de desarrollo y bienestar para sus ciudadanos. Según el Servicio Geológico de Estados Unidos, el Perú tiene 880 mil toneladas de este recurso en su territorio como recursos estimados. Si lo afirmado por el director de Recursos Naturales y Energéticos de Ingemmet, Jorge Acosta, resulta ser cierto sobre la presencia del metal en las regiones de Arequipa, Moquegua y Tacna, sería imperativo que el Estado peruano diseñe una estrategia sólida y sostenible para la explotación del recurso en estas regiones, aprovechando esta valiosa oportunidad para el desarrollo nacional. La inacción sólo perpetúa la falta de progreso y la desigualdad que tanto afecta a nuestras comunidades.