ENCENDIDO DEL ÁRBOL DE NAVIDAD EN EL MALL: ENTRE RATAS, SOLDADOS Y SHOW DE LOS NOVENTA

Crónica

La tarde se tornaba fría en Arequipa, con un cielo encapotado y 18°C en el ambiente. Pero en el Mall Aventura Plaza, el calor humano y la energía del público compensaban cualquier falta de sol. Era un espectáculo prometedor: el encendido del árbol navideño, envuelto en un show lleno de nostalgia, danza y personajes entrañables.  

A las 17:26, las luces del escenario se apagaron para dar paso al ballet de la Cámara de Arequipa. La obra continuaba con la entrada triunfal de las ratas, quienes, en una batalla coreografiada contra los soldados de Navidad, ganaron el primer enfrentamiento. Entre giros y pasos impecables, un soldado caído se levantó con un toque humorístico para bailar de nuevo.  

El público, una mezcla de padres atentos, niños absortos y otros distraídos en sus teléfonos, se mantenía entre risas y aplausos. Clara, la protagonista, irrumpió en la escena, una pequeña con carisma que logró captar la atención de todos. La historia la llevó al Reino del Azúcar, donde más danzarines de distintas culturas ofrecieron un espectáculo fascinante.  

Una bailarina con un traje que evocaba danzas españolas giraba al ritmo del ballet clásico, mientras otra, con ropas japonesas, aparecía minutos después. En seguida, un grupo masculino con trajes de inspiración rusa arrancó ovaciones con sus pasos sincronizados y la música clásica navideña de fondo.  

La danza en medio del frío

El esfuerzo y dedicación de los bailarines se notaba. A pesar de los 18°C, las danzarinas, con sus hombros al descubierto, seguían moviéndose con elegancia. Incluso los momentos de pausa, donde parecían congelarse en el escenario, añadían dramatismo. Las coreografías terminaron con una mezcla de culturas y la presencia de Clara nuevamente en escena, quien se retiró feliz, dejando al público cautivado.  

A las 18:00 horas, el árbol de Navidad se encendió de manera accidentada. Para algunos pasó desapercibido, mientras otros lo celebraron con exclamaciones. El payaso presentador apareció para animar al público y dar paso a los protagonistas de la nostalgia: Karina y Timoteo, figuras emblemáticas de la televisión infantil de los años 90.

Ingreso de Timoteo

La entrada de Timoteo con su característica frase “refurifunflay” arrancó carcajadas, especialmente cuando hizo bromas sobre la paz y la Navidad. Karina y él recordaron momentos de su programa con canciones y coreografías que hicieron que tanto adultos como niños se movieran al ritmo del show.  

Uno de los momentos más divertidos fue la aparición del profesor Otto, quien realizó un número de magia. Entre botellas “desaparecidas” y trucos delatores por parte de Timoteo, el público no dejaba de reír. Los niños, siempre atentos, señalaban cada movimiento sospechoso, y los adultos disfrutaban la química entre los personajes. 

El Encendido del árbol

A las 19:00, el árbol se iluminó por completo, marcando el punto culminante del evento. Las luces brillaban con intensidad mientras Karina y Timoteo lideraban un último baile navideño, acompañados por el entusiasmo del público que alzaba sus celulares para inmortalizar el momento.  

Cuando todo terminó, la Sinfonía Imperial Tuna cerró con un broche musical, mostrando la riqueza artística de la región. El público comenzó a dispersarse, pero no sin antes dejar escapar palabras de asombro y sonrisas que perdurarían durante toda la temporada.  

Así se vivió el encendido del árbol navideño en el Mall Aventura Plaza: un espectáculo lleno de cultura, humor y nostalgia, donde niños y adultos encontraron su propio momento especial.  

Por: Christian Ccahua Suni

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