EL ROL DE NUESTRO PAÍS FRENTE AL CAMBIO CLIMÁTICO
De acuerdo con el reporte “Statistical Review of World Energy” de BP, nuestro país tiene una contribución mínima del 0.17% de las emisiones globales de CO2, situándonos muy por debajo de naciones como China, Estados Unidos, India y Rusia, que en conjunto generan el 57.1% de las emisiones mundiales. A pesar de esta baja contribución, es vital que el Perú tome medidas concretas para contribuir a los esfuerzos globales en la protección del medio ambiente y la reducción de la contaminación del aire, con el objetivo de salvaguardar la salud de todos los ciudadanos peruanos.
Actualmente, gran parte de los esfuerzos se centran en mejorar la matriz energética del país, que ya está compuesta en un 99% por fuentes limpias, como la energía hidroeléctrica, solar, eólica y el gas natural. Sin embargo, es importante mencionar que se utilizan fuentes contaminantes, como el carbón o el diésel, en casos puntuales por razones de mantenimiento de las centrales o debido a factores climáticos. Si bien la generación de energía solo representa el 6% de las emisiones totales en el Perú, el principal desafío para la generación renovable es encontrar soluciones de almacenamiento de energía a costos eficientes para asegurar el suministro eléctrico ininterrumpido, especialmente cuando las fuentes limpias se ven afectadas por condiciones climáticas desfavorables.
El sector que presenta mayores oportunidades para reducir las emisiones en nuestro país es el transporte. La mayoría de los vehículos livianos y pesados de carga o pasajeros utilizan fuentes altamente contaminantes, como el diésel y la gasolina, que además de emitir CO2 generan material particulado y contribuyen a la mala calidad del aire y a problemas respiratorios en la población. Solo un pequeño porcentaje de este sector utiliza gas natural, una fuente de energía económica, segura y amigable con el ambiente que se encuentra disponible en nuestro territorio.
La transición hacia una movilidad más sostenible y con bajas emisiones es un desafío que debe abordarse de manera conjunta entre el sector público, el privado y la sociedad civil. Es necesario implementar medidas efectivas y continuar trabajando en incentivos y subsidios para fomentar el uso de vehículos eléctricos o con hidrógeno y lograr una migración ordenada y viable del parque vehicular hacia fuentes de energía limpias y renovables. En resumen, a pesar de la baja contribución de nuestro país a las emisiones globales de CO2, es esencial que el Perú tome medidas concretas para contribuir a la protección del planeta y a la salud de sus habitantes. La mejora de la matriz energética y la transición hacia una movilidad más limpia son áreas clave en las que se deben enfocar los esfuerzos para lograr un futuro sostenible y con menores emisiones contaminantes.
