TRABAJADORA DE LA UNSA CONTRATÓ A FAMILIAR CON JUGOSOS SUELDOS
Según la Contraloría, Liz Miriam Callata Quispe, una servidora administrativa de la Subgerencia de Logística de la UNSA, favoreció a su propia madre, Nicolasa Quispe de Callata, con tres órdenes de servicio por un total de S/ 6,950 durante el período de abril a diciembre de 2022.
Los servicios estaban relacionados con el lavado y planchado de prendas utilizadas en las clases prácticas de laboratorio de la Facultad de Medicina de la casa de estudios. El ente de control verificó el vínculo de primer grado de consanguinidad entre Callata Quispe y su madre, Nicolasa Quispe, mediante la partida de nacimiento de Callata Quispe y su ficha en Reniec, en ambos documentos figuraba Nicolasa Quispe como la progenitora de la servidora.
Se presentaron cuatro expedientes el total que pasaron por las manos de Callata Quispe para iniciar el procedimiento de contratación directa, todos por montos menores a las 8 Unidades Impositivas Tributarias (UIT). La trabajadora llevó a cabo los trámites desde la determinación del valor referencial, la cotización a un solo posible proveedor, que en este caso era su propia madre. Además, derivó los expedientes para la contratación, incluyendo las declaraciones juradas, a pesar de ser consciente de su vínculo familiar.
Los cuatro requerimientos incluían uno para abril y mayo por S/ 2,600, otro para junio por S/ 1,450, un tercero de S/ 2,600 para el período de julio y agosto, y un cuarto, que fue anulado pero estaba previsto para el período de setiembre a diciembre de 2022, por un valor de S/ 6,600.
Esta conducta viola lo establecido por la “Ley del Código de Ética de la Función Pública”, la cual prohíbe actuar con parcialidad debido a vínculos personales y mantener conflictos de intereses en el cumplimiento de deberes y funciones.
