Por qué la familia real británica cambió su apellido a Windsor en 1917
No solo en la noticia de la muerte de la reina Isabel II, sino también en la noticia de la llegada del rey Carlos III, surge la pregunta: ¿Cuál es el apellido?, la respuesta corta es: Windsor. Tanto la reina Isabel II como el padre de Isabel, el rey Jorge VI, tienen el apellido Windsor. Pero no siempre. El difunto monarca y varios de sus predecesores tenían apellidos de origen alemán, concretamente Saxe-Coburg-Gotha.
La razón por la que este apellido alemán puede transmitirse a la familia real británica se remonta al matrimonio entre la reina Victoria y el príncipe Alberto, descendiente de la familia real europea. La reina Victoria y la princesa de Gales tuvieron nueve hijos, incluido Eduardo VII, quien murió en lugar de su madre en 1901 y fue el bisabuelo de Isabel II.
Pero aunque Victoria era la monarca de Inglaterra, Eduardo VII pertenecía a la dinastía Saxe-Coburg-Gotha de su padre. Según varios expertos, incluido Richard Nelson, del periódico británico The Guardian, los habitantes del país quieren que la familia real reinante reciba un nombre enteramente británico. Sin embargo, no hubo ningún cambio. Con la llegada al trono del rey Jorge V en 1910, cuatro años después, había comenzado la Primera Guerra Mundial.